25 de junio 2025, 16:11hs
Carmen Palomino
Una amenaza inquietante irrumpió esta semana en la rutina de la Escuela N° 745: una cuenta anónima de Instagram publicó un mensaje que anunciaba un tiroteo con fecha y hora en el establecimiento. La publicación comenzó a circular el jueves pasado y, en cuestión de horas, generó alarma entre docentes, estudiantes y familias.
“Desde el jueves empezó a circular una página de Instagram donde se decía que iba a haber un tiroteo en la Escuela 745 y contaba con día y hora”, relató Jorge Ríos, delegado de la institución. El mensaje fue capturado en una imagen que una profesora compartió con el grupo de docentes, y rápidamente se viralizó, encendiendo las alarmas.
El lunes, con el regreso a clases y sin comunicación oficial por parte de la escuela, la incertidumbre fue total. “Vinimos sin tener información sobre cómo se iba a manejar esta situación”, explicó Ríos. Ante la preocupación generalizada, él y la delegada Paola Ferrada presentaron una nota a las autoridades escolares para exigir respuestas claras y medidas de contención.
Ausencias y tensión en las aulas
Mientras tanto, numerosas familias optaron por no enviar a sus hijos al establecimiento. “Muchos padres han decidido no mandar a sus hijos a raíz de la viralización de esta captura de pantalla”, agregó Ríos. Fue recién entonces que el equipo directivo informó que el caso había sido denunciado ante el Ministerio Público Fiscal.
En paralelo, el martes se organizó una charla informativa con los estudiantes en el SUM de la escuela y se incrementó la presencia policial en los horarios de entrada y salida, como medida preventiva. “Actuamos en el momento, hablamos con la vicedirectora e hicimos la nota correspondiente para llevar tranquilidad a las familias”, detalló Ferrada.
Una amenaza sin rostro
Pese a las acciones tomadas, la inquietud persiste. El origen de la amenaza sigue siendo desconocido, y la cuenta desde la que se publicó permanece activa pero anónima. “Los chicos preguntan y quieren saber, pero la realidad es que nosotros tampoco sabemos quién maneja esa cuenta”, admitió Ferrada.
Desde la delegación escolar, intentaron llevar calma a los estudiantes. “Les dijimos que estén tranquilos, que nosotros íbamos a hacer todo lo posible. Lo más importante es que no tengan miedo, que sepan que estamos acompañándolos”, concluyeron.
La investigación continúa en manos de la Justicia, mientras toda la comunidad espera que se esclarezca el hecho que alteró por completo la vida escolar.